Túneles, pistas clandestinas, cocaína en chiles jalapeño enlatados y camiones cisternas llenos de marihuana; fueron algunos de los métodos utilizados por el famoso narcotraficante y líder del cartel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán, para transportar drogas hacia los Estados Unidos.

De acuerdo con una investigación realizada por la cadena Univision, el Chapo debió de ingeniárselas para satisfacer la demanda de drogas del país norteamericano y ante el aumento de las medidas de seguridad en la frontera promovidas por el gobierno del presidente Ronald Reagan.

Según un documento elaborado por el Centro de Inteligencia EPIC y obtenido por Univision, sobre la vida del Chapo; desde mediados de los 80, el capo ya tenía una red internacional; negociaba con vendedores de heroína de Tailandia.

Además, el informe detalla que desde esa década el "Speedy", apodo que le fue otorgado a Guzmán Lorea por narcos colombianos por la rapidez con la que pasaba la droga por la frontera; tenia túneles con diseños arquitectónicos y conducía por Estados Unidos con una licencia de California.

El hallazgo de uno de sus túneles en 1990 en Douglas, Arizona, dejó al descubierto la astucia del Chapo para los negocios ilícitos.

"Fue el decomiso de drogas más espectacular de mi carrera. Lo describimos como una operación de tipo James Bond", dijo el agente de aduanas de Estados Unidos, Thomas McDermott.

Uno de los agentes de la DEA contó que encontraron el túnel por accidente cuando una de las personas que estaba afuera de la lujosa vivienda abrió un grifo para tomar agua y la mesa de billar que estaba en el interior de la residencia y que escondía el túnel, se levantó.

Sin embargo, el Chapo siguió implementando otras técnicas como la creación de una compañía empacadora de chile jalapeño en cuyas latas iba oculta la droga y la cuales eran transportadas en camiones a EE.UU.

También ideó llenar camiones cisternas con barriles de marihuana, los que camuflaba con aceite de soja.

Todos estos métodos hicieron crecer su imperio hasta junio de 1993, cuando el Chapo fue capturado en Guatemala mientras se dirigía a El Salvador a recoger drogas y armas.